Ferrocarriles por el Occidente del país
Antecedentes
Lo primero que se conoce de transporte sobre carriles paralelos procede de Inglaterra, producto de la invención de un tal Breavmonty, posteriormente se usó en Alemania en una fecha tan lejana como el siglo XVl, su uso era en las minas para le extracción de los minerales, que se introducían en los vagones y ellos se desplazaban sobre los carriles paralelos debido a que se disminuía notablemente los efectos de la fricción, este primitivo carril de madera fue modificado y sobre la superficie de rodamiento se le puso una lámina de hierro para mejorar el desplazamiento; con el paso del tiempo la forma de los carriles se perfeccionó fabricándolo enteramente de hierro, y a finales del siglo XVlll, para evitar accidentes, el uso de carriles se había generalizado en todas las minas y fundiciones de Inglaterra con extensiones en el recorrido hasta de 20 millas. Este transporte sobre raíles, tirado por fuerza humana o animal no podía constituir una innovación trascendental porque su utilización se reducía a tramos cortos.
En el 1804 Richard Trevitchick en la fábrica de Peny Darres en Gale construyó el primer artefacto parecido a lo que después sería una locomotora y logró arrastrar 10 toneladas; este equipo solo llegó a servir de atracción de feria; estos resultados aunque no fueron buenos si bastante alentadores para otros inventores.
En 1814 George Stephens logró construir una locomotora capaz de arrastrar 30 toneladas y alcanzó una velocidad de 4 millas por hora y la efectividad de la máquina quedó demostrada.
En 1821 el Parlamento Inglés aprobó un proyecto de ley para la construcción de un ferrocarril entre Stockton y el centro siderúrgico de Darlington en Durham y no fue hasta el 27 de septiembre de 1825 que se arrastró por primera vez, un tren que transportaba pasaje y carga. A pesar de este triunfo, la prueba decisiva se realizaría un tiempo después en la construcción del ferrocarril entre Manchester y Liverpool, esto conectaba el principal centro industrial de Inglaterra y el puerto de mayor importancia de esos momentos. Se realizó en esa vía una competencia, un tiempo después en un tramo de 112 km, por varios modelos de locomotoras el modelo llamado Rocket (cohete) fue la ganadora construida por Stephenson de 19 tm de peso, remolcó a 3 vagones de 13 tm cada uno, más los coches de pasajeros a una velocidad de 48 km por hora, a partir de ese momento el ferrocarril conocería el éxito en todo el mundo.
A principio del año 1830 el gobernador de Cuba Francisco Dionisio Vives recibió una carta del inventor y publicista andaluz Marcelino Calero recabando su apoyo para el proyecto de construir un ferrocarril entre Jerez de la Frontera y el puerto de Santa María en una de las más ricas regiones al sur de España, en esa misiva como en otras dos que recibió después, el andaluz le ofrecía sus servicio en el caso de que tan ventajoso proyecto fuese realizado en la isla de Cuba.

Estación de Ferrocarriles de Bejucal.
En ese mismo año se crearon dos comisiones para el análisis de dicho proyecto en el extranjero y en el país. Después de innumerables problemas para su realización, y pasados 7 años, el 19 de noviembre de 1837, en ocasión del santo de la Reina Isabel II, La Real Junta de Fomento inauguró solemnemente el Ferrocarril en Cuba. A pesar de las inclemencias del tiempo, llovía desde la madrugada, toda una multitud contempló asombrado los ruidosos movimientos de la locomotora y a las 8:00 am salió desde La Habana el primer tren en dirección a Bejucal con 70 pasajeros, distante a unos 27 kilómetros; aventajando en más de una década a la propia metrópoli Española. El tramo de Bejucal a Güines, de 46 Km se continuó de inmediato y resultó mucho más fácil, pues su trazado era por terrenos más llanos. A la salida de Bejucal pasaba por los poblados de Buenaventura, Quivicán, Guara, Melena y Güines, con un recorrido total de 71.959 km desde La Habana. Este tramo se inauguró el 19 de noviembre de 1838, o sea, exactamente un año después.